La capacidad de carga es uno de los principales factores a tener en cuenta a la hora de decantarnos por una u otra estantería de almacenaje convencional. En este artículo hablamos sobre los diferentes factores que condicionan la capacidad de carga de las estanterías metálicas y que en Ractem tenemos en cuenta a la hora de clasificar nuestros productos en tres grandes grupos:
- Estanterías de carga pesada: hasta 1.000 kg. de capacidad de carga por balda.
- Estanterías de media carga: hasta 450 kg. por balda.
- Estanterías de carga ligera: hasta 150 kg. por balda.
Resolvemos todas las dudas sobre los factores que influyen en la capacidad de carga y que diferencian a una estantería de carga pesada de otra pensada para carga más ligera.
1. Las medidas de los niveles (ancho y fondo)
En cada modelo de estantería, comprobarás que existen diferentes elementos configurables para modificar la estructura de la estantería como el alto, el ancho, el fondo y los niveles.
Aunque no sucede en todos los modelos, en muchos de ellos se cumple que, a mayor anchura escogida para la estantería, menor capacidad de carga. Tomemos el ejemplo de nuestra estantería Picking, una de las más robustas de nuestro catálogo. Su carga por nivel es de 975 kg. si tomamos como referencia el ancho mínimo (1500 mm.), pero es algo menor (660 kg. por nivel) si seleccionamos un ancho mayor (2250 mm.).
2. Materiales de la balda y su grosor
Los materiales de las baldas también son importantes a la hora de fijar la capacidad de carga. En Ractem trabajamos con aglomerado, melamina o metal y, en este caso, los materiales están escogidos de tal manera que no varía su capacidad de carga independientemente del que seleccionemos.
Sí que determinará su resistencia el grosor: a mayor grosor de la balda, mayor capacidad de carga.
En Ractem trabajamos el aglomerado con tres tipos de grosor: 19 mm. (un ejemplo sería la Picking, de carga pesada), 16 mm. (MaxPlus, también de carga pesada) o 12 mm. (C-Max, media carga).
Cuando escogemos la bandeja metálica, contamos con algunos modelos que incluyen varias bandejas metálicas que se incorporan a los dos largueros de ancho.
Un ejemplo de nuestra estantería Picking Galvanizada 250.
3. Refuerzos longitudinales (travesaños)
Los travesaños son unos refuerzos longitudinales que se incorporan en las estanterías y que atraviesan de un lado al otro. Normalmente, estos travesaños se dirigen hasta el fondo, aunque algunos modelos, como la estantería de ángulo ranurado, lo llevan a lo ancho. Estos travesaños son de acero galvanizado o varillas para las estanterías de menos carga.
Dependiendo de las dimensiones de las baldas de la estantería (atendiendo normalmente al fondo y al ancho), se incorporarán dos o tres travesaños, aunque para las medidas más pequeñas no es necesario incorporarlos.
Detalle de un travesaño de refuerzo.
4. Larguero (forma del larguero)
Las estanterías se componen de cuatro patas metálicas puntales metálicos y de varios niveles, cuyas tablas baldas están sostenidas por los largueros. Normalmente, estos largueros tienen lo que llamamos forma de L, pero en los algunos casos de las estanterías destinadas a soportar más peso de mayor anchura, se utilizan los largueros en forma de U.
Detalle de los largueros de la estantería MaxPlus. El primero, en forma de U, y el segundo, en forma de L. Se seleccionan en función de las medidas seleccionadas.
5. Peso bien repartido
Para concluir, siempre insistimos en que la carga tiene que estar uniformemente repartida en todo el nivel. Exceder la carga indicada o poner pesos excesivos en una superficie pequeña de la balda puede ocasionar problemas.
Y, hasta aquí, esperamos haber resuelto todas las dudas acerca de los factores que influyen en la capacidad de carga de nuestras estanterías industriales. Si quieres hacernos cualquier consulta, estaremos encantados de atenderte a través de cualquiera de las vías de contacto que puedes consultar aquí.